Erase una vez que se era, una princesa que vivia en un castillo que estaba custodiado por ... PUES NO! NO era por un dragón! estaba custodiado por un oso de peluche gigante.
Se decía que ningún caballero que hubiese entrado había salido con vida.
Un día llegó a las puertas del castillo un caballero con una preciosa armadura brillante brillante, en busca de la bella princesa.
Entró con sigilo, sus cinco sentidos estaban atentos a cualquier movimiento.
De repente, llegó a un salón enorme donde estaba el oso de peluche, pero estaba dormido, así que decidio subir hasta la torre aprovechando el momento.
Al fín, el caballero, llegó a la habitación de la princesa, el esperado momento había llegado, abrió la puerta...
Y vio a 6 caballeros más con la princesa. El caballero no lo podía entender. La verdad era que ninguno de ellos había salido porque la princesa no era una simple princesa, era una hechicera. Resulta que el osito de peluche no retenia a la princesa, era una especie de experimento, un día que estaba practicando con pociones unas gotas se derramaron en el osito y debido a eso crecio y cobró vida, pero era totalmente manso. Y los caballeros estaban allí bajo amenaza de la "princesita" trabajando en tareas del hogar. Y ahora en vez de 6 sirvientes, eran 7.
Al tiempo se mudaron al bosque, y tras utilizarlos en experimentos surgió la leyenda de una joven llamada "Blancanieves" que vivia "pacificamente" con 7 enanitos.
Ana.