Caminar. ¿Adelante o hacia atrás? 
creo que me gusta ir en contra de la voluntad del mundo, así que caminaré hacia delante, con paso firme y algún que otro tropiezo.
Guardar la fe, en mi, en el amor, en mis amigos y en otras cosas en las cuales tengo fe para asi poder mantener la cordura, aunque si esta es mi cordura creo que debería replantearme todas esas creencias. 
Gritar, a voluntad, no por obligación. 
Decir cosas que no les gusta a las personas y cargar con las consecuencias, algo a lo que uno se acostumbra. Lo único dificil es el elegir los momentos, aunque llega un momento en que da igual.
Sentirse importante por cosas insignificantes y miserable por las cosas que te hacen sentirte importante.
Buscar la felicidad fuera de los limites de los sentimientos porque en esos lugares encuentras motivos reales para sentirte bien.
Sentirme diferente con el paso de los años y preguntarme cada día si he cambiado, seguramente no me parezco en nada a la persona que era antes, pero en eso consiste madurar.
Algo que no quiero perder, porque es lo que me hace ser yo y sentirme viva, mi locura entrelazada con mi sentido de la responsabilidad.
Y al final de todo abrir los ojos y ver que los sueños no son sueños si no realidad maquillada con fantasía y sentimientos oscuros.