Los gritos de High cada vez eran más fuertes, el suelo se resquebrajaba, aparecían llamas a su alrededor. Los ángeles guerreros intentaron reducirle pero era imposible tenia demasiada fuerza. Su aspecto comenzó a cambiar, su cuerpo crecía a la vez que su melena plateada, la cual también cambiaba su color poco a poco se volvía pelirroja. Sus ojos que antes eran lilas se transformaron en grises, los colmillos que antes disimulaba ahora salían ansiosos de sus labios. Unas enormes alas aparecieron de su espalda, eran negras como las de un cuervo. No parecía el aspecto de un demonio común era tan bello como un vampiro pero con el poder de ambos. "Pero qué... Irine, que es eso" El rostro de Irine no salía de su asombro "¿Craven?" Irine se acercaba poco a poco a High, creyendo que era el padre de este ya que tenian cierto parecido "No, ese no es mi nombre, mi nombre es High" Nada más terminó de pronunciar esas palabras se lanzó hacia ella y la derribó de un golpe cuando fue a morderla todos los soldados ángeles se lanzaron a por él. No sirvió de nada comenzó a utilizar la magia combinada con la lucha y tras unos instantes todos estaban despedazados, aquello se convirtió en una masacre. High comenzó a acercarse a Irine, se colocó cerca de su cuello dispuesto beberse toda su sangre pero algo le detenía una voz en su interior apelaba a su sentido común y lo que sentía por Selene. En su mente se repetia el nombre de Selene una y otra vez. Irine recobró la consciencia y cuando vio a ese ser delante de ella comenzó a desprender una luz cegadora con la fuerza de un huracán, High retrocedió pero no demasiada distancia.