Punto y final.

Habrá pasado cosa de un mes y aun no me creo todo lo que ha ocurrido.
¿Cómo voy a creerme que nuestra amistad en su mayoría haya sido una mentira? y aunque no lo haya sido como voy a poder creer todo lo que dices... En estos momentos, solo lamento que jamás me dijeras nada a la cara, nada real, ni una sola verdad cuando yo fui sincera.
Cada persona vive la amistad de una manera diferente, y tu y yo no la vivimos de igual manera, por lo menos no al final.
No te hecho la culpa y yo dejaré de sentirme culpable, porque no hay razón para volver atrás, no me quedaré con los momentos amargos, sino con las sonrisas, risas y buenos momentos. ¿Para que regodearnos en unos meses dañinos? No es la imagen que quiero tener para esa amistad, porque has sido muy importante para mi, y me has ayudado y me has tendido tu mano, y te agradezco de todo corazón que hayas sido mi amiga.
Pero no puedo perdonar tus mentiras y menos dichas sin motivos. No me importa que nadie me crea, ni si quiera que intentes ponerme como un ser despreciable ante el mundo, porque mientras los que realmente me quieren crean en mi, estaré bien.
No me gusta escribir las cosas públicamente, es lo que más odio, pero quiero poner un punto y final, me cuesta mucho escribir estas palabras, y me hubiera gustado poder decírtelas a la cara, porque creo que es lo correcto, pero no estoy "estable" por decirlo de alguna manera para hablar contigo, tengo demasiadas cosas en la cabeza y no se cuando podría ser y como necesito cerrar este capitulo de mi vida lo hago por aquí por que estoy segura de que podrás leerlo.
Los recuerdos aun son dolorosos, pero se que llegará el dia en que estos recuerdos solo me traigan una sonrisa, porque no todo ha sido malo, de hecho la mayoría creo que ha sido bueno, y jamás se me olvidará el día que nuestra amistad comenzó.
Ya no me quedan fuerzas para luchar cuando las palabras que digo simplemente son reinventadas por tu mente y no te llegan.
Estas serán mis últimas palabras sobre el tema en si, asi pues lo acabo con una simple despedida, porque no tengo porque dar más explicaciones, gracias por estos años pero no por los últimos momentos.
Adiós.

Ana.

I believe.


A veces me sorprendo de como hay canciones que hagan que me identifique con ellas.

http://www.youtube.com/watch?v=qSobb9w_4JE&feature=related


Creo. (I believe, Ayaka)
En mi pecho se esconde
Un remolino de preocupación
Delante de mis ojos, mi ser tiene que seguir avanzando
¿Qué camino tomaré?
En los días llenos de gente, le dije “adiós” a mi misma
Creo en mi misma, creyendo
Siento que todo puede empezar
Creo en mi misma, en la cálida luz
Seguiré caminando sin equivocarme
Creo
En el engaño están suspendidas las pequeñas mentiras de las personas
En mi juventud vi como se apilaban
Y suspire
Me prometí  no teñir las mentiras de cualquier color
Se volvieron “negras”
Creo en mi misma, creyendo
Siento que todo puede empezar
Creo en mi misma, en la cálida luz
Seguiré caminando sin equivocarme
Creo
Ahora mis ojos reflejan incluso este amplio cielo
También siento que puedo vivir honestamente
Creo en mi misma, creyendo
Siento que todo puede empezar
Creo en mi misma, en la cálida luz
Seguiré caminando sin equivocarme
Creo

Texto. 2

Nunca pensé que existía esta clase de sentimiento.

Ahora.

He aprendido que de cada golpe que te dan, te haces más fuerte.
Más y más fuerte, golpe tras golpe... piensas, ¿seré yo? Lloras, sufres, callas, sonríes.
Seré el cuervo entre los cisnes.
Piensas, piensas, piensas...
Las palabras dañan, aparentemente no se ha dicho nada, sin embargo, todo ha salido a la luz. El corazón late tan fuerte que en mi cabeza solo escucho ese sonido.
Seguiré siendo el cuervo, no seré igual, no hablaré igual, no pensaré igual, no me resignaré, no sufriré más.
Volaré, porque aunque sea un cuervo, tengo alas y podré volar.
No me admiraran, no les dará pena si desaparezco, solo soy un cuervo al que se le echa de las cosechas. El cisne es admirado, por su belleza y elegancia.
Pero el cuervo también vuela y eso es lo que importa.
Algún día volaré y mantendré el vuelo.
Que de metáforas para decir algo tan simple.

El cambio ha llegado y mis alas ya se están batiendo.
Ahora lo entiendo. Entiendo muchas cosas.

Un paraiso enredado en mentiras. Capitulo I.-Renaciendo-




Recuerdo la sensación del viento entrelazado en mi pelo, la lluvia mojando mi cara, sensaciones, recuerdos...
He perdido la cuenta del tiempo que llevo aquí, mirando el mundo a través de un huequito del frío muro, aceptando la soberanía de quienes creen tener derecho sobre mi, esperando para poder ver de nuevo el azul del cielo.
Hablo en voz alta por si alguien me escucha, pero todos son sordos.
No encuentro en mi memoria el motivo de mi encarcelamiento, el único recuerdo que tengo es el del cielo, lo demás ha quedado borrado, para mantener este recuerdo perdí mi nombre, mi seguridad, no me queda nada, excepto esa imagen en mi mente.
El cansancio parece que se apropia de mí....





¿Dónde estoy?
Escucho... agua... chocándose contra algo...
Rápido, más rápido.
Un... ¿acantilado?
¿Qué lugar es este?
¿Habré muerto y he aparecido aquí?
No tiene sentido... vuelvo a sentir el viento, la hierba en mis pies...

Texto.

He descubierto que las personas podemos morir de tristeza, sufrimos y poco a poco desaparecemos.
Entonces es cuando nos convertimos en un cascaron vacío por que todo lo que éramos fue muriendo por el dolor...
No se expresa con lágrimas, no se muestra con una cara larga, no se alivia con gritar. 
Es lento, doloroso, asfixiante...
En ocasiones piensas que se pudo evitar, y es cierto, se puede evitar, pero esta vez se hizo tarde.
Aunque no esté aquí, aun queda perseguir recuerdos y así imitar aquella felicidad que puede llegar a pintar una bonita sonrisa en la cara.

Verdad.

Cuando mantienes la mirada fija en los ojos de otra persona, dispuesto a decirle toda la verdad, realmente no quieres mirar sus ojos, pero hay que resistir.
Algunas lágrimas se esbozan en ambos rostros, te gustaría poder sonreír y mentir y así evitar el momento, pero la verdad no es imposible de encajar, simplemente es más dolorosa.
Al admitir eso, hay que aprender a dar el segundo paso, en el cual lo dices, expones tus pensamientos, la situación es insegura, el miedo al dolor te posee, pero te mantienes firme, porque tiene que decir tú verdad, ¿miedo a quedarte solo? Es un temor que todos tenemos, pero mientras quede una sola persona que nos crea y confíe en nosotros, tendremos el valor.
Ese valor que te hace dejar atrás las mentiras, el sufrimiento...
Por eso estás ahí, delante de esa persona, sincerándote, arriesgando lo poco que te queda, intentando cambiar.
Sintiendo el peso de las palabras, observando cada expresión, respirando sin un control determinado, con un nudo en la garganta.
Esperas la reacción, tu corazón se siente aliviado pero esa carga la lleva ahora la otra persona.
Te disculpas, por ser egoísta, por no poder mentir, por decir la verdad.
Es un camino difícil, todo el que escoja ser sincero consigo mismo, pagará un precio.
Cada uno debemos decidir cuando es el momento y entonces tendremos que arriesgar uno de los caminos de la vida, al final acaba siendo una decisión, solo que más sincera.

Cosas que no olvidan.

Volviendo a situaciones de tres años atrás,
sentimientos que no cambian a mejor,
personas que van a peor,
lazos rotos por una simple estupidez,
aprendiendo del odio,
se repite, una y otra vez,
olvidar no se olvida,
un dolor contaste que aparece tras las sombras del olvido,
Resistir, solo queda...
resistir.

Jack's Lament or...



"Oh, somewhere deep inside of these bones

An emptiness began to grow

There's something out there, far from my home

A longing that I've never known"




Cerrando capítulos en mi vida.



Ayer cerré un importante capitulo en mi vida.
Me gustaría decir que será el último capitulo que cerraré, pero se que no sera así, pero siguiendo con lo que decía, el capitulo que cerré fue el teatro.
Ayer me despedí de una de mis grandes pasiones, y tuve la suerte de poder hacerlo representando Sueño de una noche de Verano, al igual que tuve la suerte de poder representarlo con personas a las que aprecio muchísimo y con otras personas que las aprecio, aunque no tenga tanto lazo emocional con ellas pero para mi fue un honor estar en el mismo escenario con todos ellos.
No fue mi mejor representación, pero fue una sensación nueva, y mi padre me dijo cuando llegué a casa, que "esta vez le había encantado mi actuación" así que me quedo con eso y los buenos momentos.
Este último año de teatro, he tenido que sacar dos obras adelante, y aunque ha sido difícil, lo he conseguido. Ha sido un gran desafío pero he aguantado toda clase de golpes y resistí y por todo en general, siento que he crecido gracias a esta experiencia y a las personas que me han ayudado y han estado ahí apoyándome, desde el fondo de mi corazón, gracias.
Creo que si no hubieran estado ahí, no hubiera resistido y seguramente hoy no podría estar escribiendo estas palabras.
Fue la mejor despedida que una actriz como yo podría pedir, al igual que el escuchar las gracias por dirigirlos de algunos compañeros más recientes, y que me digan que sin mi no será lo mismo o pedirme que no me vaya o vuelva, las emociones que sentí en esos momentos no podría describirlas.
Gracias también a esa cena tan "atípica" y divertida que me brindasteis, y sobretodo, gracias por vuestra compañía.
No puedo decir otra cosa que no sea gracias, compañeros, amigos, gracias.
Se que seguiremos viéndonos pero, no puedo el evitar estas palabras.

Tiempo.


Hoy día nos quejamos de muchas cosas, no tengo suerte en nada, todo me sale mal, nadie me escucha, nadie me entiende, etc...
Las quejas podrían llegar a ser incontables, no digo que este mal quejarse, solo digo que nos quejamos demasiado y hacemos poco a para solucionar esos problemas.
Cada día que pasa me voy dando cuenta de muchas cosas, pero hay una que es la que va marcando mi ritmo actual, y es el tiempo.
El tiempo que pierdo haciendo algunas cosas o diciendo otras tantas cuando podría estar mejorando algunas de ellas.
Cuando me pongo a pensar esto, no puedo parar de sentirme incomoda, esa incomodidad que se puede apropiar de una persona de tal manera que la lleva un estado de asfixia psicológica que puede provocarnos grandes daños.
He aprendido de distintos referentes como hacer frente a los problemas, y aunque vaya poco a poco, al final mi meta es perder el menor tiempo de mi vida.
Todo lo que he aprendido es muy útil.
Me ha ayudado cuando lo he visto todo perdido, pero sigo pensando que debo aprovechar mis horas, minutos y segundos, de la manera en la que yo consiga estar en armonía con lo que me rodea.
Como de costumbre añado esto a mis desvaríos.
Pero solo por un momento reflexionemos, nadie nos enseña a vivir, eso depende de nosotros mismos, lo que nos enseñan es a soportar la vida de una manera, luego nos toca a nosotros vivirla.

Así pues finalizo mi parrafada  de hoy pidiendo reflexión, voluntad y fuerzas, porque al contrario de otras muchas cosas, creo que son tres pilares importantes a tener en cuenta.

Ana.

Pierrot.

¿Molestarme? ¿Molestarte?
No.
Quizás parezca un payaso en ocasiones pero... no.
Es mucho más.
Estoy loca, por vivir a mi manera y no a la vuestra.
Loca por tener mis sueños y no cumplir los vuestros.
Loca por gritar y no asentir con la cabeza.
El mundo se ríe y te tienta diciéndote que no te fíes de nadie, que odies la verdad... Por eso, también estoy loca, por escuchar al mundo.
Pero hay que saber escuchar, así que seguiré volviéndome loca, es más entretenido.
Luego pensaré en como devolverme la cordura, pero tras pasar el límite.

Sin título.


Amor, sueños, eternidad, esperanza y final.
Así comienza una canción que resuena muchas veces en mi cabeza. No se que tendrá pero me inspira y me da consejo, no es que la canción en si diga algo, simplemente hace que mi otro yo piense y hable con el resto de mí. Es complicado, no espero que nadie lo comprenda y mucho menos que me pregunten si estoy bien o mal.
Poco a poco me he dado cuenta que el reloj que marcaba con un ritmo sentenciante se ha parado y es que no puedo seguir mirando hacia lugares lejanos para poder tener momentos de paz.
Poco a poco mi alma y mi corazón se han corrompido y se han llenado de mierda hablando mal y pronto.
Demasiado cansada de aguantar las estupideces del mundo, acompañados con toques de hipocresía y adornado con mentiras y mi propio egoísmo.
No soy una santa, y nunca lo he intentado, de hecho mis actos quizás son mas condenatorios que esperanzadores, pero intento ser sincera conmigo misma, cosa que por lo visto no se lleva hoy en día, que cosas, nunca he sido de seguir muchas modas.
Me da igual que piensen que soy hipócrita, me da igual que piensen que soy fría, al igual que paso de amargarme la existencia más de lo que ya la tengo, ya que nos sinceramos, ¿de qué sirve echarse más tierra encima cuando solo tienes la cabeza saliendo de la zanja?
Si, estoy enfadada, puede que con el mundo, con mi mundo y conmigo.
¿y qué si es así?
Pues nada, es mi vida y me enfado si me siento traicionada, dolorida, engañada, atrapada, asqueada de mi misma o maldecida o mil millones de adjetivos que podría seguir enumerando pero encluyendome en cada uno de ellos.
No culpo a nadie de mis actos ni de mis sentimientos, se podría decir decir que "soy Juan Palomo, yo me lo guiso y yo me lo como"
Todo lo que me ocurra es debido a decisiones que he tomado antes, ahora o tomaré dentro de un tiempo.
Odio escribir en mi blog cosas como estas porque no es la finalidad que quiero darle, pero estoy algo desbordada y utilizó esto para contradecirme también un poco y ya que no tengo diario lo pongo aquí, cuando me de la gana lo borraré o quizás no, no se.
Quiero que el tiempo pasé rápido y comenzar mi nueva vida, no se ni donde, ni cuando, pero será nueva y será un nuevo comienzo, mi corazón está podrido, mi mente cansada y posiblemente Ana hace tiempo que está guardada dentro de una cajita en algún rincón, ahora esto es lo que hay, dominada por los restos de mierda de mi vida.
Todo el día estando preocupada o enfadada o fingiendo que estoy de "puta madre" y no digo que siempre esté mal porque no es verdad, tengo felicidad en mi vida y soy feliz muchas veces, pero mi vida en sí está infectada.
Con ganas de decir demasiado y posiblemente todas esas palabras se sigan quedando encerradas, y acumulándose una a una, simplemente por no convertirme en peor persona de lo que ya soy.
Las mascaras son muy bonitas, incluso te transforman en mejor de lo que te crees, pero se rompen y en algunos casos, te la quitas, porque ya no merece la pena llevarla puesta, porque si no nunca podrás mirarte al espejo y verte a ti mismo.
Si no te gusta como eres, cambia y dejemos las quejas para los que tienen verdaderos motivos. Yo he optado por eso.
Así pues, tras esta parrafada que no quiero que se tome como una llamada de atención, lo cual odio, es simplemente un texto más.
Me quito mi máscara, saludo al público y me retiro con una gran sonrisa.
Hipócrita, poco, pero sí.
Fría, sí.
Egoísta, si.
Vengativa, sí.
Rencorosa, sí.
Algo bueno, que intentó ser mejor, eso cuenta, ¿no?

Ana.

y ¿porqué, no? xD


Harta muy harta, si, mucho y muy cansada, ¿qué de qué?
Pues de que va a ser...
De lo que a ti no te importa, ya que mis sentimientos y pensamientos son míos no de todo el que quiera cotillear.
Y me pongo mi sonrisa de salir a la calle y sigo adelante.

Sentimientos.




Latidos, uno tras otro.
Es lo único que consigo escuchar, no estoy asustada por esos sonidos que salen de mi corazón.
Realmente, lo que me asusta, es que no sujetes mi mano.
Miedo a seguir el camino sola, a no sentirte nunca más, a no escuchar tu voz mientras me dices que me quieres.
Nervios, latidos... Dices mi nombre.
Alzo la mirada, y ahí está. Tú sonrisa.
Calma, el corazón vuelve a su ritmo normal.
Esto no es bueno, he de confesar que mis ojos buscan desesperadamente un atisbo de luz en tu mirada, te quiero.
Aunque mis sentimientos se vuelven locos en muchas ocasiones, consigo controlarme, no sé si esto será para siempre, no te puedo prometer la eternidad, te puedo prometer que protegeré este sentimiento todo lo que pueda. Te puedo decir desde el fondo de mi corazón que te quiero, puedo decirte tantas cosas, que en ocasiones he pensado que me faltaría tiempo.
Pensar, pensar pensar, no quiero seguir pensando en las palabras, en este instante, lo que quiero es besarte y que me mires con tus ojos y me sonrías.

Sonrisas, miradas y unas alas marchitas.


Tenia las manos de un ángel de la guarda, siempre la ofrecía a todo el que necesitó ayuda e intentó hacer todo lo posible porque las personas que la rodeaban estuvieran bien, pero...
sus ojos son como los de un demonio.
Quiere ayudar pero sus ojos en muchas ocasiones no pueden evitar desprender un aura diferente tras el fracaso de la ayuda.
Hace tiempo no era así, suss manos estaban acompañadas por unas blancas alas que la impulsaban hacia la luz, manos desgastadas pero satisfechas por haber ayudado.
Pero un día todo cambió, las alas poco a poco se fueron marchitando como las flores en verano, su mirada se volvió feroz y decidió juzgar. Se quedó con unas manos que, cada día más, se sentían inútiles, unas alas que con el tiempo desaparecieron y unos ojos malditos.
No podía ayudar a todo el mundo, porque a veces... las personas prefieren encerrarse en si mismas y rechazar las manos que se les ofrece, no por pena, si no por afecto y cariño.
Te engañan mientras se esconden tras sonrisas que nunca serán reales, tras palabras que a fuerza de repetirlas, serán creídas por unos pocos pero nunca por si mismos.
Poco a poco las manos se convertirán en garras y más tarde su ser entero desaparecerá de la memoria de unos pocos.
Y así el ángel se escondió tras las sonrisas que una vez le mintieron.

Hasta pronto o adiós.

Despedirse es algo complicado, a veces hay que decir adiós a la persona amada, otras decir adiós a familiares que pasan a mejor vida, también existen despedidas deseadas y otras llenas de alegría contrastada con lágrimas de añoranza.
De ahí vemos que se puede uno despedir de muchas cosas, no solo de personas, también de pensamientos, sentimientos, sueños, animales, seres odiados, los cuales en la mayoría de los casos no entran en la categoría de personas.
También uno se puede despedir de uno mismo, cuando renuncia a vivir su vida siendo fiel a él y  sigue las órdenes del resto.
Creo que despedirse en la mayoría de los casos es difícil, en otros es esperado y en otros simplemente es mejor decir hasta pronto.
Hay personas que no soportan las despedidas, cada uno es libre de elegir la manera en la que quiere seguir la senda de su vida.
Mirar a los ojos, sin parpadear demasiado, respirando lentamente y soltar la palabra mágica, es la única palabra que no puede predecir reacciones ni frases pre-diseñadas.
Como en todo hay excepciones, pero no hablo de simples adiós, hablo de despedidas.
Y sinceramente para mi despedirme es dificil, pero no digo un titubeante "nos vemos" digo adiós, adiós a mis sueños, a mi manera de ver ciertas cosas, adiós a ser una persona "obediente".
A mis casi 20 años me doy cuenta de que tengo y tendré que decir adios a muchas cosas que nunca antes había pensado en desprenderme de ellas, pero bueno, la vida tiene muchos caminos para demostrarte la meta.

Dime hermana pequeña.

Ser sincero con uno mismo quizás sea lo más duro que te puede pasar en ciertas ocasiones de la vida.
Esta puede que sea la única vez que sea sincera a muchas cosas.
Admitir que tus amigos cambian.
Aceptar que te haces mayor.
Olvidar tus sueños.
Dejar de aparentar.
Cambiar por necesidad.
Ser egoísta hasta puntos demasiados altos.
Llorar delante de tu madre porque la realidad ha llegado.
Temblar mientras escribo.
El fin de una niña está llegando y el comienzo de una vida con un incierto rumbo comienza.
Quizás luego esté bien y normal, pero esta vez necesito escribir.

Contigo.


No huiré más.
Me mostraste lo que debía hacer, tenía miedo, y aunque lo superé en varias ocasiones, éste siempre permanece ahí. Simplemente se esconde hasta la próxima vez que le toque aparecer.
No importa las veces que aparezca, me enseñaste lo que sigifica tener fé en algo y si tú no puedes mantenerla yo la guardaré para ti hasta que te sientas preparada de nuevo.
Por eso estaré aquí, esperando, no eternamente, porque no puedo hacer promesas que no sé si cumpliré pero si que esperaré por lo menos hasta que puedas darme una respuesta.
Dejemos el infierno para los merecedores de él, pero no para nosotros. Vivir la vida, sentirla, hacerla realidad... No dejaré que huyas porque sea menos doloroso, no dejaré que te escondas y que te encierres en esa oscuridad porque ese no es el camino, no lo es.
Afrontar, resistir, sonreír... vivir.
No es fácil, pero ¿quién dijo que lo era?

Busco mi corazón, ¿lo has visto?

Busco una luz desesperadamente.
Una luz que me ayude a ver a través de la oscuridad que se cierne sobre mi. Hace tiempo que no se donde encontrarte, la última vez que te vi estabas llorando, las lágrimas que caían de tu rostro eran tristes y muy hermosas. La hermosura no indica algo bueno, en algunos casos.
He estado paseando por los lugares habituales en los que te podía encontrar, en frente de la cafetería a la que íbamos, cerca del parque en el que paseábamos... pero no te encuentro.
He ido a muchos sabios que vivian en lejanas montañas, he buscado respuesta en las adivinas que preguntan a sus cartas y nadie sabe nada.
Porque eres mi luz y quiero encontrarte, y seguiré buscando hasta que mi alma quede desgastada, porque eres la única persona que ha podido llevarse lo mejor de mi.
Soy alguien desesperado buscando una luz que tuvo y no supo conservar y ahora quiere encender la llama de nuevo.

Con cabeza, por favor.

Continuaba atenta a todo lo que me rodeaba, ¿cómo podía no estarlo?
Ya sabía que el mundo no era justo y que las personas eran egoístas y sentimentales, pero... seguía tendiendo fe.
Fe, en que pensarían en algo más que no fueran ellos mismos, que vieran a través de los ojos de los demás, pero ese es un sueño demasiado grande.
Casi nadie se preocupa por las personas que se preocupan por ellos. Supongo que no es culpa de las personas, simplemente es así.
Cuando te cogen cariño, te cuidan, te dan confianza... Todo es bonito, todo es agradable.
Crees que todo va a ir bien, pero poco a poco te das cuenta... no va bien.
Te apartan, te mienten mientras te miran y te dan cariño.
Ahí es donde se muestra el egoísmo humano, no piensan en nada más que sus estúpidos sentimientos y no piensan en que los demás también tenemos.
Cuando pierdes la esperanza y aceptas que todo es así, que más vas a hacer. Nada.
Entonces llega alguien y te mira a los ojos y ves que puedes confiar.
Una pequeña luz en su mirada te da la vida que se había ido apagando.

No me abandones.

Pensamientos de un pequeño gatito.
Ana.

Desvarios mañaneros.


Caminar. ¿Adelante o hacia atrás? 
creo que me gusta ir en contra de la voluntad del mundo, así que caminaré hacia delante, con paso firme y algún que otro tropiezo.
Guardar la fe, en mi, en el amor, en mis amigos y en otras cosas en las cuales tengo fe para asi poder mantener la cordura, aunque si esta es mi cordura creo que debería replantearme todas esas creencias. 
Gritar, a voluntad, no por obligación. 
Decir cosas que no les gusta a las personas y cargar con las consecuencias, algo a lo que uno se acostumbra. Lo único dificil es el elegir los momentos, aunque llega un momento en que da igual.
Sentirse importante por cosas insignificantes y miserable por las cosas que te hacen sentirte importante.
Buscar la felicidad fuera de los limites de los sentimientos porque en esos lugares encuentras motivos reales para sentirte bien.
Sentirme diferente con el paso de los años y preguntarme cada día si he cambiado, seguramente no me parezco en nada a la persona que era antes, pero en eso consiste madurar.
Algo que no quiero perder, porque es lo que me hace ser yo y sentirme viva, mi locura entrelazada con mi sentido de la responsabilidad.
Y al final de todo abrir los ojos y ver que los sueños no son sueños si no realidad maquillada con fantasía y sentimientos oscuros.



Reflexiones a media tarde.

Sentimientos, son irracionales, incontrolables, intensos, inconscientes, olvidadizos, dolorosos, confusos, agradables... tienen tantos adjetivos.
Nunca sabes por donde van a salir estas sensaciones ni cuanto van a durar. 
Cuando tienen un carácter positivo te hacen feliz y si es al contrario sufres.
¿Qué nos queda más que seguir adelante? Pues eso. 
No podemos aferrarnos a un clavo ardiendo porque esté calentito ya que tarde o temprano se enfriará.
Los sentimientos están en continuo cambio nos guste o no. EL tiempo pasa, la mentalidad cambia, el físico también, todo en nosotros es cambio así que no podemos atormentarnos por que nuestros sentimientos se contradigan y varíen cada dos por tres.

Sueños por cumplir.

Me ha costado algo de tiempo el darme cuenta, pero al fín lo he decidido. Sé lo que quiero hacer con mi vida. O por lo menos los próximos 4 años de mi vida.
Es una decisión arriesgada, muy arriesgada, pero me he decidido, no voy a huir de mis sueños ni escudarme en absurdas decisiones que tomo por mi misma, por miedo. Dejaré al lado mi inseguridad y mi miedo y no pienso parar.
Lo único que he necesitado es darme cuenta de lo que tenía que hacer y encontrar la paciencia que me faltaba, no sé si será un error, pero será el mejor error de mi vida, estoy segura.
Quizás luego el futuro no resulte como lo esperaba pero ¿qué mas da? la vida es para vivirla y cada uno tiene el derecho de intentar sacar adelante sus sueños y bueno... mi yo de 5 añitos a elegido por mi.

Cosas.


Sentirse decepcionado de uno mismo no parece ser el mejor camino a tomar.
A veces simplemente, uno se siente decaido al ver que no se esfuerza tanto como le gustaria en algo, pero seguir intentándolo es la clave.
Seguir adelante sin parar y dar todo lo que tengas por tu sueño es lo único que cuenta.
El futuro esta en las manos cada uno.

Reconocer los errores.


Lejos, muy lejos, allí es donde mando estas palabras.
Estarás... ¿alegre? ¿triste?
Espero que cualquier estado de animo que tengas, cambie para bien (o mejor) al recibir la carta.
Esta vez me he retrasado, espero que no te hayas sentido sola, se que he tardado más de lo normal en reaccionar, pero he estado pensando. Si, pensando, en todo lo que nos ha rodeado siempre, todo lo que nos unió... Siempre juntas.
Cometí el mayor error de mi vida y fue cuando decidí que otra cosa era más importante que tú, dejarte de lado y cambiarte por cosas y personas que no me hacían sentir totalmente bien.
Siempre me escuchabas cuando me sentía mal, sabías todos mis secretos... incluso los más oscuros, conocías todas mis caras, mis reacciones... Me conocías.
Cuando se pierde todo, desgraciadamente, es cuando se reacciona.
Nunca me podría imaginar que lo que creía una ilusión y prescindible, me sea tan necesario.
Te extraño, extraño el sentimiento de sentirme viva junto a ti. No había experimentado lo que era la soledad hasta que tu dejaste de estar.
Por eso quiero enmendar mi error. No sé si mi arrepentimiento será suficiente, cumpliré cualquier penitencia, me disculparé las veces que sean necesarias, haré cualquier cosa para que mi contrato sea anulado y tú, mi querida amiga, vuelvas a mi, que las aguas vuelvan a su cauce, no te dejaré más tiempo entre esas llamas encerrada por mi vanidad y mi ego.
Devuélveme mi alma, pues sin ella, tener el mundo entero no significa nada, solo es la prueba de mi desdicha.

Aparecer.


Anoche miré el reloj y pronto sería la hora, corrí hacia la salida, más rápido...
pero me tropecé y mi zapato de cristal se hizo pedazos y mi vestido se rasgó por completo. La chica que resplandecía se convirtió en una más en la oscuridad.
Sola, tirada en el camino, mis ojos desprendiendo lágrimas forzosamente, pero en realidad no duele. Solo pienso, debo darme prisa, no quiero quedarme aquí, no quiero estar sola.
Tiró el otro zapato, termino de rasgar el vestido y dejo lo justo para que me tape y me deje correr.
No me voy a detener por esto. Sigo brillando, no necesito el vestido ni los zapatos, solo necesito tener fe en mí.
Volveré.

Locura.


Esta historia trata de un ángel, era tan hermosa...
Su piel era tan clara como la nieve, sus cabellos dorados cual rayos del sol, sus ojos azules al igual que el cielo, su figura esbelta y delicada, sus mejillas sonrosadas debido a su timidez.
Siempre estaba cuidando de otros ángeles más jóvenes y les instruía a cada uno en su deber.
Era especialmente minuciosa con todo.
Un día estaba paseando por un hermoso valle y comenzó a escuchar voces, se asomó a una especie de pozo y vio a un ser que estaba herido.
Le ayudó a salir y lo curó. Se fijó en que era un demonio, pero esa no era razón para dejarle a su suerte.
Al despertar éste se enamoró del ángel, el al instante la besó, ella no comprendía lo que el demonio hacía, asi que salió huyendo de ese lugar.
El demonio al ver lo que había hecho, decidió esperar en ese lugar hasta que su amada volviera. Ella sentía que en su interior cientos de sentimientos y emociones se mezclaban.
Pasaron semanas, y un día el ángel decidió volver a aquel lugar. Allí encontró al demonio sentado junto al pozo, ella le preguntó que porque no se había marchado y el sonriente, contestó que no tenía motivos para volver, todo su mundo giraba alrededor de ese lugar y la criatura que un día allí conoció.
El ángel conmovido se acercó y entre lágrimas le confesó el amor que sentía por el demonio pero que ese sentimiento no debía florecer y que debía ser un recuerdo.
Él le suplico que no le desterrara al recuerdo... mantuvieron un amor prohibido, a escondidas de ambos mundos.
Pero como todo... tendria un fin.
En el mundo celestial lo descubrieron y para salvar a su ángel de un futuro lleno de desgracias, acabaron con su amado.
Cuando la joven vio el cuerpo sin vida rompió en llanto, y unos sentimientos que jamás había sentido se apoderaron de ella, su mirada cambió. El odio, la pena, todo se unió... la locura pudo con la razón.
El ángel que una vez fue murió y se convirtió en un demonio que destruía todo lo que le había lastimado.
Cuentan que tras ese día no se escucharon más canticos en el cielo, otro dicen que aquel demonio furioso fue abatido por los arcángeles  ...
La realidad es que aquella joven destruyó aquel pozo dejó con vida a los asesinos para que vieran que por sus actos inconscientes ella se había convertido en lo que ellos querían evitar.
Ella desapareció tras eso, nadie volvió a saber de ella.

Hipocresia.

Hay situaciones en la vida en la que nos podemos ver obligados a comportarnos de una manera totalmente diferente con los demás.
No me refiero a una simple mentira, no, sino a cambiar tu actitud completamente con una persona que no es de tu agrado. Yo misma en ocasiones lo hago, pero si puedo evitarlo, mejor.
Día a día veo como las personas son hipócritas con otras personas de las que han hablado mil veces criticándolas. Criticar, criticamos todos, sí. 
Pero realmente me indigno cuando veo a personas tan hipócritas de decir que son tan cercanas hasta ser super amigas, cuando aunque no hayan sido ambas personas pero seguro que una de ellas..
Claro no puedes ir por ahí diciéndole a las personas que son hipócritas, por que uno mismo lo es a veces,  aunque no sea hasta el mismo punto  que ellos.
No se, últimamente pensaba mucho en eso. 
El odio, la envidia, el rencor, son sentimientos muy poderosos dentro de una persona y quizás mezclados con el ego de cada uno de nosotros se crea la hipocresía.

Escuchar en silencio.

¿Has escuchado alguna vez el sonido que hace una hoja al caer del árbol? 
Si, yo tampoco había estado atenta nunca, hasta ahora. 
Una noche soñé que alguien lo hacía y parecía feliz, entonces pensé ¿qué será lo que causa su sonrisa?
Entonces marché al parque y me senté bajo la sombra de un árbol. No sabía exactamente lo que buscaba, no sabía lo que tenía que hacer. 
Así que esperé.
Comenzó a soplar una agradable brisa, me fijé en el movimiento de las hojas. 
Parecían felices, ya que su movimiento era como el de una danza. Se entrelazaban y el sol las iluminaba con gracia. Jamás había visto nada igual. 
Las hojas comenzaron a caer, y durante un breve instante, se puede escuchar un sonido, no dura mucho y no es algo que se escuché si no se está atento.
Ese sonido terminó de formar mi sonrisa, era como la risa de un bebé.
No puedo explicar con claridad porque esa serie de fenómenos me regalaron esa felicidad. 
Cada vez que estaba triste, iba allí. 
Un día me dio por pensar el motivo de todo esto. Y encontré esta maravilla gracias a la persona que sonreía en un sueño. 
Me había convertido en un reflejo de la felicidad de alguien, pero, ¿de quién? 
Nunca lo he descubierto, no se si estará viva o siquiera si existe, pero hoy día puedo sonreír gracias a su felicidad.

Luz.


Me despedí y comencé mi camino.
Era un viaje largo y duro, al principio tenía miedo.
No sabía que iba a encontrar tras cruzar esa puerta, no se si volvería a ver a las personas que he amado... No tenía respuestas.
He estado en muchas ocasiones sola, pero no me sentía sola.
Era la primera vez que estaba sola realmente. Nadie vendría a sacarme de este lugar.
Recorría el camino y llegué a un punto en el que se dividía en dos tramos ¿Cuál debería seguir?
Una vez escuche que cuando tienes dudas debes dejarte guiar por tu corazón. El mío estaba demasiado cansado, pero que otra opción tenía, quizás fuera la ultima decisión importante que tomaba.
Cerré los ojos, me concentré, centrándome en el lado derecho mi corazón comenzó a latir muy deprisa, en cambio por el otro lado, apenas latía. Se llenaba de paz y tranquilidad.
Esa tranquilidad era tan agradable... pero algo me decía que ese no era el correcto.
Seguí los latidos de mi corazón, cada vez, más fuertes, más rápidos...
¿Qué eso tan brillante? ¿El sol? ¿Una estrella?
"¡Eso es, mírame!"
No era nada de eso, eran tus ojos, esos ojos tenían el brillo de tu corazón.
Gracias por devolverme a la vida.





Ana.

Quisiera ser más...

Escondo mi rostro y me pongo a pensar que...
Quisiera ser más fuerte para soportar el peso de la agonía.
Quisiera ser más inocente para no saber que algo malo puede ocurrir.
Quisiera ser más valiente para no esconderme ante el peligro.
Quisiera hablar con la voz tranquila para transmitir seguridad.
Quisiera mirar mirar a los ojos fijamente mientras hablamos.
Quisiera deshacer el nudo de mi garganta y retener mis lágrimas.
Quisiera encontrarme con el miedo y poder decirle que no es bienvenido.

El camino a recorrer.


¿Habéis visto esas familias de las series de televisión que son tan agradables?
Pues no sé si existirán realmente, personalmente creo que son como el ratoncito Pérez, una pequeña ilusión.
Mi familia supongo que es diferente a las demás y las de los demás diferentes entre si.
 No he sido la mejor de mi clase, pero me he esforzado al máximo en los estudios, no soy una chica juerguista y suelo llegar pronto a casa. No bebo, no fumo, no me drogo... en general, me comporto de una manera totalmente complaciente.
Soy un poco vaga y también algo infantil, pero cuando tengo que pensar con la madurez de una persona de 20 años, pienso.
Si no estoy todo el día con una sonrisa de oreja a oreja, por eso, ya tengo que estar enfadada y tiene que pasarme algo. Entonces llega el momento de esa frase "Si estas enfadada con nosotros no lo pagues" "No estoy enfadada" contesto "Pues con esa cara y ese tono de voz quien lo diría"
Cuando eso sucede se me suele quedar la cara a cuadros.
Tampoco suelo tener un mal carácter en mi casa, voy a lo mio. Leo mis cómics, veo las series que me gustan, dibujo, escucho música...
Durante la estancia en el instituto todo estaba bien, estudiaba y en mis ratos libres pues lo dedicaba al ocio.
Pero ahora que he terminado y por desgracia me he quedado con un año en blanco, el ambiente a cambiado un poco.
Al principio me deprimi, porque estaba perdiendo un año de mi vida y bueno... a mi eso me afecta. Estuve buscando cursos, pero no salían.
Estoy buscando trabajo, incluso fui a una entrevista, pero tampoco salió adelante.
No me he quedado parada durante todo este tiempo. Tampoco es que esté todos los días en la calle buscando trabajo pero lo busco.
Creo que no soy una persona inútil que no hace nada excepto levantarse y quejarse de que todo es una mierda. No soy esa clase de chica, tengo mis días malos, como todos, pero hago todo lo que puedo para no estar sin hacer nada.
¿El porqué de esta entrada? Porque me siento algo mal hoy. A veces veo mi sueño más lejos de lo que me gustaría. Pero si esto es lo que tengo que superar para llegar a mi destino definitivamente, lo superaré.

Mentiras, sonrisas y un corazón.


Me siento en el suelo y me pongo a mirar los albumes antiguos. Miro las fotos y vienen a mí recuerdos de alegría y diversión. Sonreír desde el fondo de mi corazón, es algo que solía hacer de pequeña. Quizás fue un mal hábito.
Con el tiempo dejé de sonreír.
Luego mi sonrisa volvió, pero no era la misma. Me siento como una copia falsa de mi misma cuando sonrío. 
Toda mi vida era una pequeña mentira que con el tiempo se hizo grande.
Rencor, quizás uno de los peores sentimientos que tiene el ser humano, y yo tengo tanto guardado, que me absorbe por completo y me impide avanzar. 
Día a día intentó mejorar, me gustaría recuperar aquella sonrisa, me gustaría no vivir por el rencor y el odio. 
Pero a veces los actos dañan tanto que no nos damos cuenta de la profundidad de la herida hasta que es tarde. No pasa nada, intentó salir poco a poco de las sombras. 
El problema, cada minuto, cada acto, cada palabra, van añadiéndose a la mancha que hay en mi alma y se hace más grande y fuerte.
Cuesta demasiado salir, cuesta demasiado sonreír, cuesta demasiado mirar la luz y no derretirme ante ella. 
Años sacando espinas de un corazón rodeado por ellas, quitar la espina no nos da la seguridad de curar la herida, puede seguir sangrando.
No importa tengo tiempo, y dicen que la mejor medicina es el tiempo junto con la paciencia. 
Creo que hoy escribo sin un sentido, pero así poco a poco saco las espinas, una a una o incluso parte por parte... 
Sé que estaré sola en esto, tenía miedo, bueno realmente tenia terror de sacar el demonio que llevo dentro, no quiero lastimar a las personas que quiero.
Pero es hora de abrir la puerta, que se rompan las cadenas, que las espinas salgan y sangren las heridas, solo así podre avanzar, solo así podre recuperarme...
Solo así puedo volver sonreir, sin sentirme como una mentira. 

Dos caras.



Estaba escuchando música, con los ojos cerrados y acurrucada. Tenia miedo.
¿Miedo? Si, miedo.
Estaba confusa acerca de como he llegado a ser como soy hoy en día. ¿Cuál había sido mi motivación? No estaba segura.
A veces me deje llevar por los sentimientos, otras por la razón.
Nadie a notado nunca mis lágrimas tras mi sonrisa, ¿esa es la idea, no? que nadie sepa... La Verdad.
Demasiado aterradora para admitirla, así que mejor reprimirla.
Demasiado surrealista para ser cierta, así que se envuelve en mentiras.
Palabra tras palabra. Expresión tras expresión.
Falso.
El dolor que he sentido.. si. Ha sido quizás esa la herramienta que he utilizado para forjarme.
No me excusaré ante nadie, porque, nadie sabrá nunca si es cierto o no.
Vivo en el mundo sin estar realmente en él. ¿Salvación? ¿Arrepentimiento? ¿Rendirse?
No puedo salvarme porque mi mundo está perdido en la nada.
No puedo arrepentirme porque todo es verdad.
No puedo rendirme porque entonces, tendré que pedir disculpas.

Ana.

Sonríe



Paseando con  los ojos caídos, pensando en nada, sin fijarse en el mundo.
Mucho tiempo viviendo en una dimensión que realmente no existe. Siempre viendo la vida como el que solo ve sombras.
El dolor es demasiado fuerte, se nota en su expresión, te miro a los ojos, sonríes pero estos estan tristes, entonces encuentro la mentira en tu sonrisa.
Me duele verte asi. No puedo evitar abrazarte, llora.
Puedes apoyarte en mi, las lágrimas son solo una manera de expresar emociones que son demasiado fuertes para que el alma las soporte solas.
Por eso, no deambules por las calles con el camino perdido, no te escondas tras las gafas, puedes contar conmigo.
No pierdas el rumbo, tu vida no pasará, yo estoy contigo.
Mi hombro estará para que puedas apoyarte, mi mano te alcanzará cuando no puedas levantarte, mi sonrisa se mostrará ante tí para que puedas reir...
Compartiré mi mundo hasta que puedas tener el tuyo, ¿me preguntas porqué?
Pues porque soy tu amiga.

Empezar por el final.


Me cuesta abrir la ventana de mi habitación, si la luz de un nuevo día entra en este lugar significará que todo a terminado.
Todo este tiempo juntos, olvidando lo que era más importante para mi, solo pensaba en lo nuestro.
Me cuesta moverme, me siento como una marioneta sin hilos, no hago otra cosa más que mirar esa ventana.  No quiero que termine, este sentimiento sigue dentro de mi, ya que te has ido porque no te lo llevaste contigo. Es como una piedra que no me deja moverme.
No.
No pienso quedarme tirada en esta cama solo con mis lágrimas y rodeada de tus fotos. Has tomado una decisión, así que me voy a levantar.
Me acerco hacia la ventana, retiro la cortina. Poco a poco abro la persiana, la luz entra, lo baña todo con su claridad. Me siento como si algo en mi despertara, aunque los sentimientos siguen aquí aprisionando mi pecho, se que esto no será para siempre.
La ventana esta abierta, entra una nueva luz, un nuevo aire, una nueva vida.
El final va a ser mi comienzo.




La vida es un escenario y yo una actriz.



Hace poco me di cuenta lo mucho que me gusta actuar. De lo que disfruto en el escenario, convirtiéndome en cualquier cosa.
Poder cambiar de personalidad, apariencia, habla...
Recordé porque de pequeña siempre decía, "de mayor seré actriz"
Ese sentimiento es de las pocas cosas que aun hacen que siga adelante. No me importa de lo que se trate, el personaje en sí para mí suele ser suficiente. Aunque salga 5 minutos, no importa, porque en esos momentos no seré Ana, simplemente otra persona.
No solo hago teatro por eso, desde que comencé en ello es algo que me ha ayudado a forjarme tal y como soy. Podría decir que poco a poco me descubrí a mi misma.
No importa si tengo que revolcarme por el escenario, no importa si tengo que ser fría y mirar con odio, no importa si soy un simple árbol. Lo que importa es que puedo ser un personaje.
Cuando te dicen que o quien tienes que interpretar, al principio no sabes muy bien que hacer, pero cuando empiezas a forjar su personalidad, su pasado, TODO, estas creando algo por ti mismo que va a cobrar vida y eso algo que no podría describir.

Ana.

Melodia.


Soy un joven que busca la realidad de los mitos e historias. He viajado por muchos lugares de Grecia, India, Inglaterra, Irlanda, Egipto...
Todos estos viajes han despertado en mi un nuevo mundo. Hoy voy por un bosque, está muy verde y sopla un refrescante viento.
Escuché que por estos lugares se aparece un espíritu de la naturaleza. Atrae a los viajeros con una dulce música de violín mientras baila con tal destreza que parece que flota en el aire.
La mayoría de las veces no encuentro realidad en mis viajes, solo fantasía. A veces son ciertos esos relatos, otras a medias y algunas  simples inventos.
Sobre esta joven cautivadora de corazones se dice que se encuentra cerca de un lago. Sus cabellos son rojos, como el sol en su amanecer, su piel blanca, al igual que las nubes y sus ojos se dividen en dos colores, uno es azul, representante del cielo y el otro verde, perteneciente a la hierba y lo vegetal. Por último, los labios rosados, como una flor.
Estaba atardeciendo, busqué un lugar donde acampar. Mientras buscaba encontré lo que podía ser el lago del que hablaba la historia. Pero, no había nadie.
Supongo que era lógico.
Acampé cerca de allí. Por la posición de la luna, debería ser casi media noche y al instante comencé a escuchar una melodía... era de violín.
Fui con prisa pero cauto, entonces al llegar allí, la vi. La descripción que se hacía de ella no le hacía justicia, era el ser más bello que había contemplado jamás.
Se percató de mi presencia, siguió tocando, pero no apartaba su mirada de mi. Su sonrisa era dulce, su baile, ligero.
Mi corazón estaba siendo hechizado por su música, su belleza, su mirada... por todo lo que ella era y tenía.
¿Magia? ¿Amor? ¿Locura?
No. Nada de eso era lo que me estaba pasando.
Parece que la sonrisa más dulce puede matarte poco a poco.
Cuando amaneció, me encontré tirado cerca de la orilla de aquel lago. Al volver a la aldea que había cerca, aquella melodía no salía de mi cabeza, resonaba en mi mente, en mi corazón... Provocaba inquietud en mi alma.
Cuando dije que la sonrisa más dulce puede matarte, no fue porque ella me hubiese matado. Era evidente que estaba vivo.
Pero el precio por escuchar su música y que mis ojos la hubieran contemplado, era el de vivir sin ellos el resto de mi vida.
Así que, de alguna manera, me estaba muriendo.



Ana.

Cartas prometidas.



No se muy bien como comenzar esta carta. Hace ya varios años que no sabes nada de mi ni yo de ti. 
Estaba paseando por los acantilados y una suave brisa me trajo tu recuerdo. 
Supongo que he de preguntarte, ¿qué tal estas? ¿Cómo te ha ido la vida en mi ausencia? Sé que prometí mantener el contacto, que cada semana te llamaría los domingos antes de acostarme, que cada mes te mandaría una postal de sitios que he visitado...
Si, he roto mi promesa.
Puede que ni siquiera te llegue esta carta, quizás te llegue pero no la abras, pero la verdad, necesitaba escribirla. Sé que han pasado 10 años, te lo he comentado al principio, soy consciente del tiempo. Pero aquí sentada en mitad de algún lugar me han entrado ganas de saber de ti. 
Es una decisión egoísta pero sabías que yo era así, te extraño, pero no me malinterpretes, no te mando esto porque aún te quiera. Yo decidí separar nuestros caminos, pero extraño tu risa y tus pensamientos. No solo fuimos novios, también fuimos amigos y al amigo que hay en ti apelo para que lea esta carta.
Quiero decir muchas cosas y la vez no estoy diciendo nada, no escribo para disculparme, sabes que cuando te miraba a los ojos llegó un momento en que solo veía el reflejo del cielo, si me hubiera quedado quizás ninguno habríamos tenido el valor para separarnos del otro, pero el cielo de tus ojos no era el único que deseaba ver. 
Yo estoy bien, tengo una casita con una chimenea y dos perros enormes. Tengo nuevos amigos, y he salido con varias personas, pero creo que el amor no es para mi, o quizás aún no he conocido a la persona correcta, da igual tampoco es que la busque. Soy feliz, todo va bien. Vivo cerca de unos acantilados, ¡ah! no solo tengo dos perros, mañana voy a comprar dos gatitos pequeños que un amigo me ha ofrecido porque el no puede cuidarlos. Por ahora, esa es mi vida. ¿En el trabajo? Bien, nunca imagine que me levantaría cada mañana con una sonrisa real para ir al trabajo.
Creo que debo ir terminando, si deseas contestarme mi dirección viene en el sobre. 
Me alegro de haberte escrito, espero que te alegres de saber de mi, aunque sea tarde.
Suerte.


Ana.

Llanto.



Hoy mis ojos queman. Escucho desde mi cama lo que ocurre a mi alrededor, no quiero salir de ella y afrontar la realidad. Estoy escuchando a mi hermana pequeña llorar, todos te queríamos mucho pequeñin, ella llora y llora, ojalá yo pudiera llorar como ella, pero mis lágrimas se quedan dentro de mi. Me inundan poco a poco hasta que vuelvan a desbordarse en la noche por mis ojos. Ayer sentía incredulidad y un intenso dolor, seguía sin salir de mi cama. Mi padre le dice a mi hermana que pare, pero la comprendo. Por mucho que uno quiera parar no se puede. Quizás hay personas que sienten estas cosas más que otras, o piensen la culpa es vuestra por comprar un hamster. No se si tienen razón o no, lo único que sé es que el me ayudo y le estoy muy agradecida, por eso lloro y me siento triste.
Se que en unos días pensaré en los buenos momentos y sonreire, pero en las noche, entre mis sábanas aun derramaré alguna lágrima.
Ana.

A veces.


Porque a veces el mundo se me viene encima y lloro. Porque a veces algo me desgarra el alma y grito. Porque a veces me siento sola y pido un abrazo. Porque a veces necesito ser ignorante y escucho música muy alta. Porque a veces quiero contar algo y escribo. Porque a veces necesito pensar y huyo a un mundo diferente. Porque a veces me siento egocéntrica y me río. Porque a veces me invade la rutina y cambio mi aspecto. Porque a veces estoy nerviosa y hablo mucho. Porque a veces tengo que sonreír y soy hipócrita. Porque a veces hay cosas que no puedo evitar y las afronto. Porque a veces soy egoísta y me enorgullezco. Porque a veces necesito olvidar y me disfrazo.
Porque con todos esos " a veces" siempre soy yo.

Pasión.





Nos encontramos en un lugar. Nuestras miradas se cruzan, tu estas bailando con muchas chicas, somos dos personas totalmente opuestas, en tus ojos se puede ver la pasión y el deseo y en la mía solo inocencia.
Entonces dejas de bailar con ellas y te acercas lentamente a mi, te muerdes el labio. Mi respiración aumenta, me atrapas entre tus brazos, la lujuria en tu mirada aumenta, el deseo comienza en la mía, tus palabras resuenan en mis oidos, quedan como eco en mi cabeza y hacen que mi cuerpo se estremezca.... Dices que la inocencia se nota en mi rostro, mis mejillas se encienden y nos marchamos para estar a solas.
Tus manos me rodean, no te detengo.
Siempre he sido la niña buena, pero tu me arrastras al infierno y no me importa quemarme si tus besos viajan por mi cuerpo haciendo que descubra una de las sensaciones más placenteras que jamás he experimentado.
Recorres mi cuerpo, no quiero que acabe, la chispa que tu mirada encendió ha ido creciendo hasta convertirse en una llama que hace que pierda el control de mi misma y me entregue a ti.
No me importa si no me vuelves a llamar, no importa si no volvemos a coincidir, lo que importa es que esa noche nos fundimos el uno con el otro y la sensación de tus besos esta grabada en mi piel y mentiría si dijese que no pienso en ti, y he mentido antes cuando dije que no importaba. Pero como me has llamado aun puedo decir que no importa.

Deseos.



Estaba lloviendo y entré en una casa que parecía no ser de nadie para refugiarme de la tormenta. Estaba empapada, mis piernas temblaban y mis dientes castañeteaban del frío. Supongo que en ocasiones normales tendría miedo pero tenía demasiado frío como para pensar en asustarme. Escuchaba ruidos extraños que provenían de una sala que había tras una enorme puerta de madera roída. Pasos fuertes, voces, música de los 80', y a medida que me acercaba se podía oler el humo y un poco a funeraria.
Parecía una fiesta, pero, ¿de quién?.
No me pareció peligroso y crucé la roñosa puerta, y vi a un montón de personas en una fiesta como de Halloween, pero... en pleno Febrero. Supuse que era de Halloween, porque todos llevaban trajes de ese tipo de fiestas. He de confesar que estaban muy conseguidos, había hombres lobos, zombies, fantasmas, monstruos de todas las clases. Pensé que podía unirme a ella, así de paso entraria en calor y me secaría.
Mientras bailaba como buenamente podía, se me acerco un hombre bastante guapo, con ojos azul electrico, piel muy clara y unos labios que destacaban por su color rojo intenso, era evidente su disfraz era el de un vampiro. Comenzó a bailar conmigo, no podía apartar la mirada de sus ojos, eran tan atrayentes a veces parecía hasta hipnóticos. Ya no sentía nada de frío, al contrario. Lo único que sentía era una fogosa atracción hacia esa persona.
Todo se estaba envolviendo en una atmósfera muy sensual en la que yo deseaba estar con esa persona que apenas unos minutos conocía. Comenzamos a acercarnos, bailábamos cada vez más juntos, hasta que me rodeo con sus brazos por las espalda, sentía la música, el ambiente cargado, sus labios por mi cuello...
¿Sus labios en mi cuello? Me aparté un poco, algo no iba bien, ¿que me ocurria? Realmente deseaba tener sus labios cerca, pero ¿que deseaba él?
Cuando ya era tarde observe bien, no eran disfraces, eran reales. Pero para cuando me di cuenta, la verdad, solo deseaba que ese vampiro tan poco carnavalesco me tomará como el desease.
Así que me volví a acercar.